Sí, ese momento tan temido en la vida de cada mujer, sofocos, cambios de humor, bajones de ánimo… para remediar estos efectos de la menopausia, muchos profesionales recomiendan practicar yoga.

Los beneficios del yoga existen tanto a nivel físico como a nivel mental. 

Alguno de los beneficios físicos de una práctica constate de yoga son estos:

Mejora de la elasticidad tanto en nuestra columna vertebral como en las articulaciones, lo que nos ayuda a ganas movilidad, y a que nuestras articulaciones sean más resistentes.

– Ayuda a ganar fuerza muscular, ya que estamos fortaleciendo y tonificando nuestros músculos utilizando nuestro propio peso, lo que disminuye el riesgo de lesiones.

Ayuda a mejorar la capacidad pulmonar y la circulación, lo que favorece el funcionamiento del sistema cardiovascular, digestivo y reproductor, así como el sistema nervioso. También ayuda al sistema endocrino con la producción de estrógenos, glándulas que no pueden realizar su función si estamos estresados.

Por otro lado y quizás más importantes, están los beneficios mentales:

– Ayuda a reducir el nivel de estrés.

– Nos ayuda a dormir mejor.

Aumenta la energía y el buen humor, por lo que reduce el riesgo de depresión.

– Hace que nuestra mente este más ágil y concentrada.

Todo ello es debido a que durante una clase de yoga, estamos respirando y concentrados tanto en la respiración como en la práctica, por lo que no pensamos en nada, eso a la larga hace que nuestra mente se relaje.

Es muy importante que sepas que los resultados no llegan en un día, sino que es un cambio progresivo, que has de tener paciencia y que debes saber escuchar a tu cuerpo. Esto último te lo digo porque el yoga se trata de paciencia, no te van a salir las posturas el primer día, ni vas a saber concentrarte ni respirar el primer día, pero poco a poco siguiendo las indicaciones del profesor lo irás consiguiendo.

Existen muchas posturas de yoga, y cada una de ellas tiene beneficios concretos, por ejemplo hay posturas de yoga para dormir mejor, algo importante durante la menopausia ya que a veces los sofocos te lo impiden

  • Un ejemplo es la postura conocida como supta-padadangusthasana, para realizarla tienes que tumbarte boca arriba en el suelo, y levantar la pierna derecha, de forma que puedas con tu mano tocar el dedo gordo del pie, sino consigues tocarte el dedo con la pierna estirada, puedes doblarla ligeramente hasta que alcances a sujetar tu dedo o utilizar un cinturón. La postura final sería con el mentón pegado en la espinilla. Con la mano derecha sujetas el dedo del pie derecho, la mano izquierda permanece sobre el muslo izquierdo, para evitar que la cadera se levante, ambas caderas deben estar en línea. Repite con el lado izquierdo.

    Además de ayudar contra el insomnio, previene dolores de cabeza y ayuda a mejorar la digestión.

  • Otra postura muy recomendada es el medio puente, tumbado boca arriba, preferiblemente sobre un mat o esterilla, con los brazos a la largo del cuerpo, apoyas las palmas de las manos en el mat y flexionas ambas piernas, formando un ángulo de 45 grados, una vez así, eleva la pelvis todo lo que puedas manteniendo los hombros pegados al suelo. Puedes mantener los brazos a ambos lados del cuerpo o puedes colocar las manos debajo de la espalda y entrelazarlas. Se trata de elevar la pelvis todo lo que puedas y hacer presión con los pies en el suelo. Mantenemos aquí 10 respiraciones.

  • Sentados en el suelo con las piernas cruzadas, en la tradicional postura de meditación, podemos juntar las palmas de las manos a la altura del corazón o bien con los brazos estirados colocar las manos encima de las rodillas. La espalda estirada, la cara y el cuello relajados, sin tensión. Nos quedaremos en esta postura un mínimo de 10 respiraciones, pero podemos estar más tiempo si lo deseamos.

El yoga, además de ser un estilo de vida, es también una actividad física que nos ayuda a mantener los niveles de vitalidad elevados, reduciendo así el riesgo de padecer enfermedades crónicas. Por todo ello ayuda a reducir las molestias propias de la menopausia, ya que reduce los síntomas de las fluctuaciones de las hormonas.

Así que, si estas en esa época de tu vida, anímate y prueba, seguro que notas los efectos del yoga y tu humor cambiará para mejor 😉