Me gustaría ayudarte, como ya lo hicieron conmigo, a que tu vida mejore y sea más plena y consciente en todos los sentidos.
Y por eso te voy a contar las 4 razones por las que empecé a practicar yoga y por las que tu deberías empezar a practicar hoy mismo:
1. El yoga es para todos
Sí que puedes: Otra cosa es que no quieras. El famoso “no puedo” significa poner excusas y justificaciones perjudiciales hacia los demás que acarrean a la larga el autoengaño.
Ramiro Calle (pionero del yoga en España).
No importa la flexibilidad o la fortaleza que tengas. El yoga se adapta a ti con cientos de posturas, con sus correspondientes variantes y alternativas.
Yo no era una persona especialmente flexible, de hecho ni podía llegar a tocarme los pies con las manos, y al poco tiempo de practicarlo sentí un gran evolución, en menos de 2 meses noté mi cuerpo mucho más flexible, me empecé a sentir mucho más ágil y dejé de tener los dolores de espalda que nunca conseguía eliminar (ni fisio, ni gimnasio…). Estar sentada delante del ordenador era horrible para mi espalda y ya ni me acuerdo del dolor. Yoga y flexibilidad van de la mano, y sus efectos son reales.
Practicantes de yoga en el Día Internacional de Yoga en Madrid, 21 de junio de 2015
2. El yoga te enseña a respirar
Casi ninguno respiramos bien. Es algo que hacemos de forma intuitiva y nunca nos paramos a pensar en cómo lo hacemos.
Yo nunca lo había pensado y cuando empecé a respirar de forma consciente, empecé a controlar mi mente, mis pensamientos, mis emociones.
Si empiezas a respirar correctamente dejaras de tener estrés, dejarás de ser una persona nerviosa, encontrarás la calma en tu vida, mejorará tu concentración y volverás a dormir como un bebé (puedes visitar el post yoga para dormir).
3. El yoga te pone en forma
No es el fin del yoga en sí mismo sino un efecto secundario de la práctica. El yoga es ejercicio físico también, y muy duro (aunque puedas pensar que no, si no lo conoces). Si es lo que te atrae de primeras esta bien, lo importante es que lo pruebes, da igual la razón, pero quiero que sepas que el yoga es mucho más que algo físico.
Si practicas habitualmente además de ganar flexibilidad, te volverás más fuerte, tu cuerpo se estilizará y tus malos hábitos posturales cambiarán en muy poco tiempo. Conseguirás estos resultados a través de una práctica respetuosa con tu propio cuerpo, sin forzarlo ni dañarlo, sino escuchándolo.
4. El yoga te ayuda a que conozcas tu cuerpo y tu mente
Es un camino hacia la observación y el autoconocimiento. Con la práctica atenta y consciente del yoga aprendes a observar y escuchar tu cuerpo. Al principio observas tu postura, tu alineamiento, qué parte del cuerpo se está estirando. Después comienzas a escuchar más profundamente, llegas incluso a notar tus movimientos intestinales y sentirás el latido de tu corazón con más fuerza.
Con la práctica podrás observar tus procesos mentales, ideas, pensamientos, recuerdos y empezarás a notar los grandes beneficios a nivel psicológico que te aportará la practica del yoga (serena la mente, ayuda a superar el estrés, la ansiedad y la depresión; mejora el humor, reduce la ira y aumenta la autoestima…)
Nos vemos!
Namasted
